Fui invitado para ir al Senado en representación de 1.700 médicos que han firmado el manifiesto por la vida, junto a otros colegas. El objetivo era presentarles a los senadores de la comisiones de Constitución y Salud los argumentos médicos que existen para rechazar el actual proyecto de despenalización del aborto por tres causas. Fue una experiencia muy positiva, pero con un aspecto desilusionante.
Lo primero, fue tomar mucha más conciencia de que la primera causal sobre el riesgo de la vida de la madre parece estar siendo manipulada para que en su redacción deje abierta la interpretación para el aborto libre, al poner en forma vaga el peligro de la vida de la madre como algo actual o futuro. Médicamente, esta causal no se justifica, como se ha explicado innumerables veces.
Lo segundo, fue el poder conversar con senadores que están en contra del proyecto y explayarnos especialmente en la primera y en la segunda causal, pues la tercera no es estrictamente del ámbito médico. La segunda causal, desde el punto de vista médico, debería orientarse a atenuar la angustia devastadora de un embarazo con una malformación letal y a prevenir el aborto con sus efectos deletéreos para su salud mental y su calidad de vida, a través de un adecuado acompañamiento.
Un aspecto que lamentamos especialmente fue que se retiraran de la comisión de Salud, la presidenta, senadora Carolina Goic, y los senadores Guido Girardi y Fulvio Rossi. Entiendo al senador Girardi, quien después me comentó en pasillos que tenía una discrepancia insalvable con nuestra posición, pues para él el ser humano comenzaba a ser persona con el nacimiento, y por lo tanto había que respetar el derecho de la madre a decidir. Pero más me afectó el que no estuviera la senadora Goic, que debería representar los valores de la herencia que dejaron los fundadores de la Democracia Cristiana, en especial de don Eduardo Frei Montalva, con quien tuve el privilegio de conversar sobre los cambios sociales que requería Chile, consecuente con los valores del humanismo cristiano que inspiraron a ese partido. Esto, porque mucha gente que piensa que la senadora Goic estaría de acuerdo con las tres causales, pensamos que habría sido de gran valor un diálogo franco y respetuoso con ella desde la experiencia y conocimiento médico.
Esperamos que esa gran masa silenciosa que ha estado haciendo oír su voz en relación con las graves consecuencias de este proyecto impacte en la conciencia de todos los senadores.
Dr. Patricio Ventura-Juncá
Profesor universitario
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